222

"...se contaban fielmente los sueños de la noche. Cabeza contra cabeza, acariciándose, confundiendo las piernas y las manos, se esforzaban por traducir con palabras del mundo de fuera todo lo que habían vivido en las horas de tiniebla(...)Después le tocaba a él contar los suyos, y a veces a mitad de un relato sus manos empezaban a acariciarse y pasaban de los sueños al amor, se dormían de nuevo, llegaban tarde a todas partes."

Julio Cortázar, Rayuela.


Me encantan los números capicúa y él número 2. Y esta es mi entrada 222.Te la dedico. MAGIA. Tengo el frasco de cristal lleno de azúcar. 1-2-3 y chachán!! soñaste??