22.4.08
ya está!
Y punto final. Listo. Ya está.
Ahora queda enviarlo, esperar, empezar un plan b. y c y d y e y f y g....y así hasta acabar con todas las letras. Pero eso sí con una buena banda sonora.
Dulces sueños a todos y feliz desayuno. ; )
gracias por la paciencia!!
14.4.08
acontecimiento cotidianos
hoy, por una serie de acontecimientos cotidianos, he sido feliz.
Para celebrarlo canto The Jayhawks en la ducha (más o menos igual de mal que el que grabó este vídeo ;) y me corto el pelo y me compro una colonia que me hace oler a gominolas.
Para celebrarlo canto The Jayhawks en la ducha (más o menos igual de mal que el que grabó este vídeo ;) y me corto el pelo y me compro una colonia que me hace oler a gominolas.
13.4.08
confesiones III
11.4.08
esta mañana
Yo hoy no quería levantarme e ir a trabajar. No quería. No quería con todas mis fuerzas, todas, todas juntas. Y me levanté y fuí. Y encontré esto aquí y menos mal. Son las cosas que ayudan a seguir. Aunque creo que me equivoqué de profesión, pero lo pienso y no se lo cuento a nadie, o al menos no poniendo cara seria. Hablo mucho. Las cosas que de verdad me importan no las digo, o las digo bromeando, o las escribo en el blog.
8.4.08
hay días desbordados de silencio
Te echo de menos, no me acostumbro a volver a casa y preparar la cena en silencio. Hoy llueve, me quedé un buen rato mirando como llovía desde la ventana. La verdad que es duro levantarse sin darle a nadie los buenos días, irse a trabajar y sentarse sola, 5 horas, decirle gracias al cartero, decir un café para llevar, por favor. Volver a casa, hacer la comida, sentarse a comer, mirar el reloj, hacer zapping, apagar la televisón, quedarse un minuto escuchando el silencio para después decirme en alto...vamos nena, hay que volver al trabajo.
Ponerme las botas, el abrigo, coger las llaves, el móvil, cerrar la puerta.
Llegar a la oficina, sentarme sola, quedarme un rato escuchando llover, una hora, dos horas, tres horas. Apagar el ordenador, apagar la luz, cerrar la puerta. Caminar debajo del paraguas y un par de cebollas, por favor. Volver a casa, dejar el abrigo, guardar la compra, calentar un poco de leche y encender el ordenador y quedarme mirando como llueve desde la ventana.
y pensar...no me acostumbro a volver a casa y preparar la cena en silencio. demasiado silencio. hay algunos días desbordados de silencio.
4.4.08
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